El consumo generalizado y global de Internet ha abierto muchas posibilidades en cuanto al acceso a plataformas online, si bien también conlleva una serie de restricciones impuestas por las restricciones geográficas o de riesgos asociados a las amenazas de los malwares.

Hay una solución común para todos estos problemas y no es otra que la de usar VPN para realizar las conexiones. Sus ventajas son evidentes, pues rompe muchas barreras y genera un espacio de privacidad altamente cifrado, lo que garantiza la seguridad del usuario y de sus documentos durante todo el tiempo de conexión. 

El aumento de la velocidad a la hora de navegar por Internet es uno de los principales beneficios de utilizar esta herramienta, ‘Virtual Private Network’, que es una red privada de conexión. Está capacitada para optimizar todos los recursos disponibles y conseguir así que la navegación sea rápida y eficaz.

Esta optimización se obtiene en todos los aspectos, tanto en los pasos entre páginas webs como en el consumo de contenido audiovisual y de videojuegos, así como en la descarga y subida de archivos. 

La seguridad es otro de los puntos que se refuerzan con el uso de una VPN. Este tipo de programas cuentan con códigos de encriptación de alto nivel, cifrados de tipo militar que garantizan con total certeza la privacidad de la persona que está navegando.

Este aspecto es fundamental, tanto para el uso de la red para un interés personal como en el ámbito profesional. Cada vez más trabajadores se llevan el trabajo a casa y necesitan conectarse a redes generales para compartir documentos con sus compañeros. Es una información muy delicada que merece ser encriptada y protegida. 

La VPN, además, es un espacio para almacenar información privada, por lo que resulta de gran utilidad para aquellas personas que están acostumbradas a viajar, ya sea por motivos de ocio o laborales. La herramienta guarda las contraseñas o los documentos privados, entre otros detalles; así que el usuario solo necesita conectarse para recuperar todo su trabajo. 

Acceso a contenido restringido

Entre los principales motivos para contratar los servicios de una VPN está la posibilidad de conectarse a servidores de otros países. Este punto es necesario para consumir, desde España y sin restricciones, contenido televisivo de Argentina, por ejemplo.

De esta manera, las limitaciones impuestas por motivos geográficos (el precio del servicio de Netflix varía según cada país) se superan y el usuario puede tener acceso a todo tipo de contenido, como las retransmisiones deportivas, películas y series de televisión.

Algunos de estos servicios se emiten en abierto en una zona, mientras que en la contigua está sujeta a unos derechos televisivos. 

La superación de estas limitaciones por motivos geográficos también tiene una especial incidencia en aquellos países que ejercen una censura sobre el contenido disponible en Internet, dentro de su territorio.

Una persona alojada en China puede instalar una VPN y conectarse a un servidor de un país europeo y tiene así disponible una gran cantidad de información y datos a los que no tendría acceso de otra manera.