Crear una buena contraseña es más importante que nunca y con tanta información crítica que proteger (correos electrónicos, tarjetas de crédito, documentos compartidos), simplemente no hay excusas para usar malas contraseñas.
Siempre debes crear una contraseña que te sea fácil de recordar, pero que sería muy difícil que un extraño pueda adivinar. Puede sonar contradictorio, pero no es tan difícil como parece, sin embargo, algunas personas aún no lo entienden. De todas maneras aquí hay una guía para crear contraseñas seguras.
Aunque no lo creas, esa contraseña fácil de recordar que se te ocurrió y que pensaste que tal vez a mas nadie se le ha ocurrido. Es mas común de lo que piensas, y lo que es peor, es la primera que van tratar de usa los Hackers. Estas son:
Las 5 peores contraseñas del mundo
- Simple, sucesiva: Podría ser fácil para usted recordar “123456″ o “sistema qwerty”, pero, ¿sabés qué?: cualquiera que haya visto un teclado entrará en tu correo electrónico en 30 segundos. Hacer tu contraseña igual o similar a tu inicio de sesión también es un grave error. Recuerda, que cuando se trata de crear contraseñas creativas, la simplicidad es mala y la complejidad es su amiga.
- El nombre de un ser querido: Puedes querer a tu mamá con toda el alma, pero usar su nombre como clave es presa fácil para un atacante. El nombre de tu sobrina favorita o el nombre de tu perro tampoco es buena idea, especialmente cuando esa información puede aparecer en tu página de Facebook donde todos la pueden ver.
- Ponerse duro: Sí, el objetivo de una contraseña es mantener alejadas a las personas. Pero usar este tema como tu contraseña (“contraseña”, “noteacerques”, “dejameentrar”, “alejate”), tendrá el resultado exactamente opuesto a lo que estás buscando.
- Palabras geniales: Algunas palabras son geniales y fáciles de recordar. Eso también significa que no sólo tú las tienes siempre en la punta de la lengua, también están en la punta de la lengua de los crackers. Manténte alejado de palabras como “dragón”, “mustang” o “ninja”.
- Arreglos simples: Utilizar contraseñas simples y hacerles una mínima modificación tampoco funcionará. Sólo porque agregaste un numeral o un signo de exclamación (“c0ntraseña”, “beisboL”, “madre!”) a tu fácilmente decodificable clave de ingreso no significa que tus cuentas estén seguras. No lo están. Es importante mezclar letras minúsculas, letras mayúsculas, numerales y caracteres especiales en tu contraseña, pero no seas predecible.
Lo que puedes hacer: “Desarrolla contraseñas complejas mezclando letras minúsculas y mayúsculas, números y caracteres especiales y asegúrate de usar una contraseña diferente para cada sitio”, sigue estos consejos para crear contraseñas fáciles de recordar.
Si tienes problemas para recordar o crear contraseñas sólidas y complejas, prueba Kaspersky Password Manager, que puede relizar este trabajo en tu lugar y almacenarlas en un estado asegurado criptográficamente.